Juninho Vieira ya se entrena con el Flamengo, por el que se decidió para dejar en la estacada a un Sevilla con el que ya se había comprometido. El delantero brasileño había acordado incluso su salario pero dio un volantazo y decidió marcharse a su país, donde le pagan casi tres veces más de lo que iba a cobrar en el Ramón Sánchez-Pizjuán.

Aunque el expunta del Qarabag da otra razón de su espantá: la llamada de un viejo conocido de la afición española y sobre todo de la del Atlético de Madrid, Filipe Luis. Entrenador del Flamengo desde hace unos meses, tras retirarse allí como jugador, el exlateral colchonero fue la clave: “Es muy difícil decir ‘no’ al Flamengo y, sobre todo, a su entrenador. Aquí está Filipe Luis, cuya carrera como jugador todos conocen, y ahora también su carrera como entrenador. Estoy feliz. Para mí todo fue rápido: primero pasé el examen médico y luego inmediatamente comencé a entrenarme”.

Qarabag y Sevilla lo tenían prácticamente todo acordado a cambio de entre unos cuatro millones de euros por el traspaso. Juninho también había dado su OK a la operación y solo faltaba el viaje a la capital hispalense… Pero el Flamengo, posiblemente a través de Filipe Luis como relata el propio jugador, provocó el repentino cambio de opinión.

Y el director deportivo Víctor Orta tuvo que ponerse a buscar un nuevo objetivo para la delantera, con otro brasileño como máximo objetivo ahora mismo. Alerrando, máximo goleador del último Brasilerao que pertenece al RB Bragantino, es el favorito de los nervionenses, aunque también existe interés de dos clubes moscovitas, el Spartak y el CSKA. El Sevilla cuenta con la voluntad del 9 de jugar en LaLiga, pero quiere que la decisión de Bragantino y del propio jugador no se dilate demasiado.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.